👉 Mi misión - DIA 1 & Ejercicio 🥰 #misionalnorte

“Mi misión al Norte – Tatiana Romero”
Índice
- Día 1 – Llegada a Capilla del Monte
- Conexión con los guías
- Ciudad intraterrena
- Presentación como guardiana
- La puerta dorada
- La biblioteca viviente
- Ejercicio guiado
Día 1 – Llegada a Capilla del Monte
Después de 9 horas por la carretera, llegamos a Capilla del Monte, nos instalamos y comenzamos a relajarnos. Teníamos hambre, conectamos con la comida, la camita, el trabajo y el lugar. El sol iba cayendo y el atardecer estaba llegando.
Conexión con los guías
Diego me preguntó si los chicos (nuestros guías) tenían algo para decir. Me senté entre las piedras del río para ver si había algún mensaje. Frente al Cerro Uritorco, comencé a recibir información: ese cerro es un punto energético reconocido como lugar de conexión y sanación. El inconsciente colectivo lo identifica como un portal, y por eso era el lugar perfecto para iniciar. Las energías del colectivo iban a estar abiertas para recibir, para que la Tierra comience a integrar la energía de la misión.
Ciudad intraterrena
Mis guías me llevaron de la mano a una ciudad intra terrena, un lugar físicamente comparable a un cenote cueva como los de México. Había agua y una cascada brillante y serena. En ese lugar se presentó un gran ser intraterreno, de tonos verdes brillantes.
Presentación como guardiana
Me presenté como Tatiana, una humana, y también como mi fractal: la guardiana de la sabiduría ancestral. Ese fractal está conectado con la biblioteca viviente de la Tierra, que guarda la información del universo, de otras razas, dimensiones y tiempos. El fractal de la guardiana puede compartir esta información y también ayudar a que otros accedan a ella para su propósito de vida y servicio a la humanidad.
La puerta dorada
El ser intraterreno me pidió que mire la cascada. Detrás del agua, distinguí una gran puerta dorada. Al reconocerla, el agua se abrió como un telón. La puerta se abrió por sí misma. El ser me pidió que no la cruzara, pero me permitió mirar qué había del otro lado.
La biblioteca viviente
Del otro lado de la puerta, una energía dorada inundó mi visión. Estaba la biblioteca viviente, brillando como el sol. El ser me dijo que aún no era el momento de atravesarla. La biblioteca había despertado, y la guardiana estaba presente. Tatiana respiró y comenzó a anotar y dibujar lo visto para luego compartirlo.
Ejercicio guiado
Si estás dispuesto a dar servicio y compartir la sabiduría, puedes acceder a la información de la biblioteca viviente. A continuación, te invito al ejercicio canalizado:
- Acomoda tu cuerpo, cierra los ojos y comienza a respirar profundo.
- Visualiza una luz verde que te envuelve y te lleva hacia dentro de la Tierra.
- Llega a un cenote cueva con una cascada de agua clara. Escucha su sonido.
- Un ser de colores verdes te da la bienvenida. Puedes hablarle.
- Observa la cascada. Mira a través del agua. Una gran puerta dorada aparece.
- La puerta se entreabre y una luz dorada sale de ella. Observa sin cruzarla.
- Del otro lado está la biblioteca viviente: miles de libros y toda la sabiduría ancestral.
- Agradece al guardián y permite que la luz verde te eleve de nuevo hacia tu cuerpo.